jueves, 23 de febrero de 2012

Mitja de Granollers: 1h 22' y los segundos que nunca se dicen



Frío, hacía mucho frío. -3 grados marcaba el termómetro cuando nos juntamos algunos compañeros en Granollers para afrontar una de las medias maratones mas populares del país.


Hacía días que comentaba la jugada sobre que ritmos podría atacar, y si los podría aguantar. En un primer momento me decante por ir a por el tiempo de 1h20' (a eso ya se le puede llamar correr), pero en seguida rectifiqué y marqué el objetivo en intentar bajar de 1h24'.
Es la primera media de la temporada y no he hecho ningún tipo de preparación específica para ella, solamente el trabajo de pre-temporada y los duros entrenamientos que ejecuta mi hermano. No se si el cuerpo aguantará un ritmo por debajo de 4'/km durante toda la carrera, pero siempre confío en que sí.

Una vez en el cajón de salida me encuentro con Pedro, un crack en la carrera a pié, y me comenta que va a ir a buscar la hora-veinte. En un momento de euforia se me cruzan los cables y decido salir con él. Me tomo un gel, me pongo crema calentadora y adelante.
Dan la salida, y como siempre en los primeros kilómetros, cuesta regular el ritmo. Tal es así que pasamos por el kilómetro dos con un tiempo en el crono de 7'30'', las sensaciones son buenísimas pero bajo considerablemente el ritmo para no petar a la primera de cambio. Pedro se me adelanta no más de 100 metros y así hasta el km 6 donde vuelvo a contactar con él. Comentamos que este es un ritmo bueno y así llegamos al km 10 donde miro el crono, que marca un tiempo de 39' 45''. Perfecto! mantenemos el objetivo inicial.
Empiezan las subidas. Este año han modificado el recorrido, y la ascensión a la Garriga se hace por una carretera mas llevadera hasta el punto de giro. Pedro se me vuelve a escapar en el km 12 pero como el circuito empieza a bajar, alargo la zancada y aumento un poco el ritmo hasta cogerlo de nuevo en el km 16. Los repechones los paso aguantando el tirón y viendo que adelanto a muchos corredores y echando un ojo al crono en cada kilómetro,  veo que es posible bajar incluso un poco más el tiempo del objetivo inicial. 
Las sensaciones habían sido buenísimas hasta el km 19 donde me veo que me estoy quedando sin fuerza, pero entre los ánimos de la gente y Pedro que estaba pegado a mi lado tiro con la cabeza los dos kilometros restantes.


El ambiente en la llegada es espectacular, muchísima gente a lado y lado de la carretera anima a todo el que pasa por delante suyo. Ya veo el arco de llegada, un poco mas y por fin paro el crono en 1h22'44''. Una marca que me hace sonreír y estar contentísimo con el rendimiento que he dado. Una media de 3'56'' el kilómetro hacen que esta temporada esté muy motivado para cualquier competición.

Pero como siempre digo, lo mejor es el ambiente de equipo que se vive, aunque cada uno participemos individualmente.


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